Perdida en sus ojos estaba, en aquel hermoso atardecer,se veía tan guapo con ese traje blanco y con sus hermosos rulos que caían de su frente, cada minuto, cada segundo que pasaba me enamoraba mas y mas de el. Al fin el día habia llegado y mi sueño se había cumplido,casarme con el mas maravilloso hombre de la tierra en el lugar mas estupendo y hermoso que pudiera existir..."el mar". Nuestros pies jugaban en la arena, el viento acariciaba nuestros rostros y el sonido de las gaviotas llenaban nuestros oídos con una melodía preciosa. Si era un sueño entonces no quería despertar, nunca jamas.
Acepto. - Dijo Michael emocionado. - Bien ya puede besar a la novia. - Acercándose lentamente a mi, me regalo un dulce e inolvidable beso terminado con una sonrisa y miles de aplausos. La música en vivo se hacia notar, un precioso sonido de violín llenaba el espacio entre cada gota del mar y entre cada abrazo y felicitación acabo la larga reunión. Ahí estabamos de nuevo solo nosotros dos en un espacio de arte creado por dios, el sonido de las olas nos dejaba cada vez mas relajados, pero sabíamos que era hora de regresar.
Te amo con toda mi vida entera. - Susurraba en mi oído mientras yo contestaba con un largo y cálido beso, pero el sonido de un auto nos hizo parar, era para nosotros teníamos que volver a casa.
En el camino la neblina se hacia mas tensa cada vez, dificultando al chófer ver la autopista, hacia frío y provocando que michael me abrazara el chófer grito y dio un giro al volante espantoso haciendo que el auto cayera a un barranco, cerré los ojos y apreté a mike hacia mi. Quede inconsciente.
Al siguiente día...
No sabia como había llegado hasta ahí, ni que era ese lugar en donde estaba yo, ¿mi nombre? no, tampoco lo recordaba, me sentía como una extraña y con todas esas jeringas en mi cuerpo grite tratando de escapar de aquel espantoso lugar, llorando pedía ayuda, y unos señores con traje blanco y con la mitad de la cara tapada me agarraban de los brazos provocando un dolor en ellos.
Intente tranquilizarme y después de unos minutos lo logre, solo quería saber donde estaba, que había pasado, no recordaba nada.
¿donde estoy? ¿por que estoy aquí?. - preguntaba desesperada. - ¡Tranquila, estas en el hospital, ayer sufriste un terrible accidente en la autopista! ¿no recuerdas nada? - preguntaba esa mujer de blanco extrañada. - No la verdad no, me siento mal, ya me quiero ir. - Parándome de la cama. - ¡No no, tienes que quedarte, por lo que a mi parece estas mal y el medico te tiene que revisar, creo ....has....perdido la memoria!. - ¿que? ¿que había pasado? - Me sentía estresada, y no sabia que hacer, ni siquiera sabia si tenia hogar o una familia.
Abrí mis ojos lentamente no sabia que había pasado ni en donde estaba, voltee hacia mi alrededor y era todo blanco, se sentía una paz enorme, como me hubiera gustado que desde niño me sintiera así, sin golpes ni regaños por parte de joseph "mi padre", ya que, tenia que ir a buscar a mi campanita, al amor de mi vida que no soportaba estar lejos de ella apenas a un día de nuestra boda, unos niños hermosos con caras angelicales empezaron a aparecer provocando que me tallara los ojos, - ¿que? ¿esas eran unas alas? ¡uaoh tengo que estar soñando! - me repetía cada vez, una puerta se abría delante de mi, la curiosidad me gano y entre en ella, ¡¡no podía creer lo que había visto,debe de ser un sueño, mejor tenia que pedir ayuda, y buscar a una persona que resuelva mis raras preguntas !!
-Hijo mio. - Decía una voz masculina detrás de mi, voltee. - No cabía duda, si estaba soñando. - ¿donde estoy? ¿ quien es usted?. - Pregunte con miedo y con ganas de llorar. - No temas hijo soy tu padre, estas en el lugar indicado para descansar en paz y respirar amor. - No no puedo estar....mue - Muerto. - Interrumpió aquel señor. ¡¡¡No no esto debe ser un error, debo estar soñando esto no puede estar pasando!!! - Me tire al piso a llorar como nunca lo había echo, me sentía realmente mal, solo quería regresar a casa y abrazar a mi campanita, solo eso pedía, solo eso. - Michael, aveces pongo pruebas a las personas para que crezcan y maduren con ellos mismos y luego hagan un cambio, esto solo es una prueba mas para los dos, para ti y para tu esposa. - ¡¡Por favor, quiero regresar con ella no puedo estar lejos de lo que mas amo!! - Ven, levántate. - Me decía mientras me sostenía del brazo.- Te traje aquí por que tu destino era este, ibas a sufrir mucho aya abajo, ¿quieres ver a odette? - ¡¡Por favor!! - y con los ojos rojos sonreí. - Ven por aquí. - Entramos a otra puerta donde muchos angelitos volaban felices, habían de toda raza, color y edad, era fascinante.
Ahí esta. -dijo - ¡¿que le hacen?! ¡¿por que llora?!. - Grite desesperado.- Michael, ella perdió la memoria en el accidente.....
